¿Cómo se clasifican los vinos espumosos?
La clasificación de los vinos espumosos dentro de la Unión Europea (UE) se basa principalmente en el contenido de azúcar residual presente en el momento del embotellado. Esta clasificación informa al consumidor sobre una característica diferenciadora clave entre estos vinos. Las categorías de los vinos espumosos en la UE, según el contenido en azúcar residual, son las siguientes:
- Brut Nature: Vinos espumosos con un nivel de azúcar residual inferior a 3 gramos por litro. Este azúcar debe proceder exclusivamente de la elaboración, por lo que no pueden recibir licor de expedición y deben rellenarse con el mismo vino.
- Extra Brut: Vinos espumosos con un nivel de azúcar residual inferior a 6 gramos por litro.
- Brut: Vinos espumosos con un nivel de azúcar residual inferior a 12 gramos por litro.
- Extra Seco: Vinos espumosos con un nivel de azúcar residual entre 12 y 17 gramos por litro.
- Seco: Vinos espumosos con un nivel de azúcar residual entre 17 y 32 gramos por litro.
- Semi Seco: Vinos espumosos con un nivel de azúcar residual entre 32 y 50 gramos por litro.
- Dulce: Vinos espumosos con un nivel de azúcar residual superior a 50 gramos por litro.
El contenido de azúcar en el vino no podrá ser superior ni inferior a más de 3 gramos por litro del contenido indicado en la etiqueta. La normativa también establece que si el contenido de azúcar justifica el uso de dos de los términos anteriores, sólo podrá utilizarse uno de ellos.
Clasificación de la Organización Internacional de Vino (OIV)
La clasificación de los vinos espumosos según la Organización Internacional de Vino (OIV) se aplica a los países que no tienen legislaciones específicas. En su clasificación, la OIV no cuenta con las categorías Brut Nature y Extra Brut, por lo que todos los vinos espumosos que presentan un nivel de azúcar residual de como máximo 12 gramos por litro, se etiquetan como Brut. El resto de categorías son las mismas que recoge la UE y con las mismas cantidades de azúcar residual. La tolerancia de las categorías es de +3 gramos de azúcar por litro.
El proceso de clasificación de un vino espumoso
El contenido de azúcar residual en los vinos espumosos se determina al final del proceso de elaboración. Un vino base se transforma en vino espumoso mediante una segunda fermentación en botella, que se logra al añadir un licor de tiraje (mezcla de vino, azúcar, levaduras y nutrientes). Después de esta fermentación, el vino resultante es seco y sin azúcar residual, ya que las levaduras consumen casi todo el azúcar añadido.
En el siguiente paso, conocido como degüelle, se eliminan los restos de levaduras, y el vino se rellena con un licor de expedición, que puede estar compuesto por sacarosa, mosto de uva, vino o una mezcla de estos productos. Este licor de expedición define la categoría del vino espumoso y aporta características gustativas especiales, sin elevar en más de 0,5% vol. el nivel alcohólico del vino finalizado.
Para más información sobre la clasificación y elaboración de vinos espumosos, puedes visitar Wine Folly y International Organisation of Vine and Wine (OIV).